jueves, 29 de mayo de 2008

la moneda en el orto.

Una mujer en la calle me pide que la escuche. Está con su hijo de 5 años. Veo que en sus manos lleva una bandeja con saleros de cerámica. Me pide que la ayude. Estoy apurado, me da miedo cuando la gente en la calle me obliga a parar. Le digo eso, que estoy apurado.
Me dice que me meta la moneda en el orto, me dice pedazo de hijo de puta, me dice que yo no sé lo que es trabajar.
Mi cabeza está en un aeropuerto. No conozco a nadie. Quiero llorar. Cuando era chico decía mucho eso. Quiero llorar.
Siento que recibí sin motivo una cachetada de mi mamá. Quiero encontrar un lugar donde poder detenerme. Quedarme allí y amarte. Hacer desaparecer el pasado. Hacer desaparecer los aeropuertos. Hacer desaparecer el presente.

jueves, 22 de mayo de 2008

¿qué?

teclear fuerte el teclado. no mirarle la cara a la persona que está del otro lado del mostrador. decirle imposible. que me llene el formulario. que necesito una fotocopia de la primera y segunda hoja de su documento. que llene otra vez el formulario. que haga mejor letra. que nadie sepa como me llamo. que a una de cada diez personas le caiga bien mi cara. tratar bien a esa persona. invitar a ella a tomar un helado. pedir medio kilo para compartir. que nos pongamos de acuerdo en que mouse de limón y mouse de chocolate van muy bien. que me manche la remera. que no me importe la mancha. que nos riamos un rato. que discutamos un poco. que sepamos que no todo es tan lindo. que disfrutemos ese poquito. que no nos entendamos del todo. que nos despertemos. que sigamos durmiendo. que lindo.

martes, 20 de mayo de 2008

un mensaje nuevo

Mis amigos me dicen que entre hermanos esas cosas se cuentan, pero Esteban nunca abrió la boca. En cambio Sofi, me contó ni bien pasó media hora del hecho. Esa noche después del cumple, ya estaba en la cama dando vueltas tratanto de encontrar la mejor postura cuando me mandó un mensaje de texto: Curtí con tu hermano… Te quiero.
Ahora me pregunto si realmente me quería enterar. Me pregunto desde cuándo la palabra curtir se usa tanto. También me pregunto cómo hizo para unir esas dos ideas en un mensaje tan corto, se cogió a mi hermano y me dice te quiero, con sólo tres puntos suspensivos de distancia.

martes, 13 de mayo de 2008

yo edito.

- Ah si si , los conozco, claro que los conozco. En esa productora trabajé hace como doce años o más. Trabajé es una forma de decir, hice un laburo de unos días. Me acuerdo que era la época de Menem y se festejaban los diez años de la televisión privada. El aviso era de una famlia tipo, una familia normal, yo era la madre, y hacían pasar los diez años así en la vida cotidiana de una familia, una cosa así. Me acuerdo que grabamos como tres días, con mucha producción, mucha guita. Yo llegué por un casting... Con el grupo de actores estábamos indignados porque no nos querían pagar las horas extras…unos hijos de puta, si me decís que era para le televisión publica te la acepto. Lo peor es que nunca vi el aviso y una noche como al mes de haberlo grabado me llama mi viejo y me dice “hija estas en cadena nacional”. Me quedé helada. Además viste antes cadena nacional era otra cosa, no como ahora. Imaginate salir en cadena nacional.
- Mirá vos que bueno.
- Si, estuvo bueno, bah, yo muchos trabajos de actriz así para televisión no hice. Viste que ahora todas se mueren por hacer un aviso o cosas así, a mi me estressa.y entre nosotros te digo, no tengo edad para eso. ¿Vos haces castings?
- No…
- Claro… Hacer una cola para un casting…dejate de joder. Yo por lo menos a esta edad quiero hacer cosas que me gusten. Cosas que disfrute de hacerlas, cosas que escriba yo, que sepa de qué están hablando.
- Claro…
- Son ciclos, me entendés. Yo siempre hice cosas distintas. Empecé por la pintura, después escenografía, así de apoco llegué al teatro, después dramaturgia. Eso me gusta, ir buscando nuevas cosas. Soy bastante curiosa, digamos.
- Bueno, yo me bajo en esta.
- Nos vemos.
- Nos vemos, suerte.

Bajo del subte y al lado mío hay una chica con un bebé. Ellos también bajan en mi estación de costumbre. El bebé está abrigado, con mucha lana blanca. El bebé me mira y se ríe. Ni sabe de qué se ríe. Lo miro, le abro los ojos y él estornuda. Sus ojitos se cierran por la fuerza que hizo.
Me llevo esa imagen del viaje en subte. Me di cuenta que un nene estornudando fue lo más lindo que vi y escuché esa tarde.

martes, 6 de mayo de 2008

yo tampoco.

- Má…
- ¿Qué pasa?
- No me puedo dormir.
- ¿Hay ruidos?
- No…
- Quedate tranquilito, cerrá los ojos y vas a ver que te vas a quedar dormido.
- No puedo. Estoy, ansioso, como nervioso.
- ¿Y de qué vas a estar nervioso vos?
- No se. Me acuesto y me agarra como un chucho por todo el cuerpo que me hace temblar, así como cuando estoy por entrar al dentista o como la noche antes de que nos vayamos a Miramar. Son nervios. Pienso en muchas cosas y me imagino muchas más y doy vueltas y vueltas. Y no me puedo dormir, no tengo sueño.
- ¿Pero en qué pensas?
- En Alemania.
- Pero si vos no conocés Alemania. ¿En la escuela lo están viendo?
- Me hubiera gustado nacer en Alemania. ¿Por que me tocó Argentina? ¿Quién decide eso?
- Simón, es tarde.
- ¿Sabés qué hora es en Alemania? Ya se están levantando, están más adelantados.
- Pero estamos en Argentina y a esta hora se duerme.
- ¿Y quién decide la hora? ¿Los presidentes?
- No Simón, la hora ya está desde hace mucho. Andá a tu pieza y acostate, y dejá de pensar en esas cosas. Pensá que tenés que dormir. Eso pensá.
- Aunque sea me hubiera gustado nacer hace mucho. Cuando se decidían esas cosas, como la de la hora y las líneas que dividen los países o los nombres.
- Simón…
- Mi nombre sí me gusta.
- Bueno dame un beso y andá a dormir.
- ¿Ma?
- ¿Qué pasa?
- ¿A vos dónde te hubiera gustado nacer?
- En las Islas Canarias.
- ¿Dios decide todo eso?
- Simón son las 4 y media.
- Hasta mañana.

lunes, 5 de mayo de 2008

wash and go

Abrió los ojos y tuvo miedo que sea la maldita hora. Con un tembleque interior abrió el celular y esa luz pobre lo encandiló. Cuatro y veintiocho, todavía se puede dormir un poco más, inclusive continuar el sueño. Es especialista en eso, con una breve concentración pudo lograr que el sueño se prolongue, como un capítulo más.
A las ocho ya estaba bajo la ducha, con mucho frío. Esa mañana se cansó de pensar que algo bueno le va a suceder. Siempre creyó eso, de chiquito se sintió una persona con suerte, con una especie de despensa de optimismo. Algo que le hacía vivir con la idea de que alguna sorpresa positiva va a llegar algún día se fundió. Desapareció y no dejó rastros.
No desayunó, se lavó los dientes y salió a la calle con el pelo mojado. Y con mucho frío.